La apatía nos invade
Sentirnos tristes o desanimados no implica necesariamente que tengamos una depresión. Las emociones son respuestas que nuestro cuerpo y nuestra mente manifiestan ante diferentes situaciones o vivencias que tenemos. Podemos sentir enfado, culpa, tristeza, melancolía…cualquiera de estas emociones nos sobreviene de repente, permanecen en nosotros unos momentos y finalmente se van.
El “estado de ánimo” se diferencia de una emoción, en que es más duradero y más difícil cambiarlo. Dentro de los trastornos del estado ánimo, es la Depresión, una de las más incapacitantes. Según los datos que ofrece la Organización Mundial de la Salud, la Depresión podría afectar al 10% de la población Española.
En la depresión suelen predominar estos síntomas: desesperanza, tristeza, pérdida de placer o de interés por aquellas cosas que antes sí te lo proporcionaban, falta de energía, cansancio, dificultad a la hora de tomar decisiones, sentimientos de culpabilidad o inutilidad, insomnio…